Visitas guiadas en Berlín en español, tours regulares y tours privados.

¿Por qué te recomendamos hacer visitas guiadas en Berlín?

Aunque es relativamente fácil llegar hasta los puntos turísticos de interés como el Muro de Berlín o la Puerta de Brandenburgo, esta es una ciudad atípica, difícil de conocer por cuenta propia y que necesita ser contada. Si no quieres quedarte en un plano muy superficial, deja que la gente que vive aquí te la muestre las huellas de su intensa historia y te transmita sus sutilezas.

Se dice que la historia del Berlín es la historia del S.XX,  aunque sea una ciudad en constante evolución.

Tienes muchas opciones para conocer la ciudad como se merece: entender la fundación del Imperio Alemán a las puertas del Reichstag, trasladarte a los felices años 20 en la Friedrichstrasse, visitar la Topografía del Terror para indagar en la dictadura nazi. Observar el paso de la guerra entre la metralla, los bunkers o la Iglesia de la Memoria.

Visitar el antiguo campo de concentración de Sachsenhausen,  el Monumento al Holocausto, el Monumento a los Homosexuales, el Monumento a los Gitanos, el Andén 17, o contemplar las Stolpersteine en barrios como Kreuzberg, el Barrio Judío o Prenzaluerberg, para comprender cómo Alemania gestiona la memoria de su historia más oscura.

Caminar sobre la doble línea de adoquines hasta llegar a la East Side Gallery. Visitar el Memorial al Muro de Berlín y conocer las historias de alemanes y berlineses que quedaron divididos durante 28 años. Contrastar las diferencias aún palpables entre Alexander Platz y el Zoo o la Iglesia de la Memoria, entre Berlín Oriental y Berlín Occidental.

Y aunque el S.XX esté muy presente, también puedes viajar al pasado del Berlín prusiano en la Bebel Platz o la Gendarmenmarkt, o desplazarte hasta Potsdam para pasear por los jardines que albergaron palacios de muchos Federicos, Guillermos o Federicos Guillermos.

Reservarte algún día para ir a alguno de los 180 museos que tiene la ciudad, algunos muy emblemáticos como el Pérgamo o el Neues Museum en la Isla de los Museos o disfrutar de la Opera o la Filármonica de Berlín.

Y cómo no, tomarte una buena cerveza en sus peculiares bares y cervecerías  o “rastrear” el domingo en uno de sus muchos rastros o Mercados de Pulgas, como el del Mauerpark.

Te ofrecemos varios recorridos para que no te pierdas ningún detalle.